
Pasta con pesto de pistachos y carabineros: receta gourmet fácil y deliciosa
La pasta con pesto de pistachos y carabineros es una receta que enamora a primera vista y conquista al primer bocado. En concreto, el chef Gianni Pinto nos propone esta versión: casarecce Garofalo con crema de pecorino, pesto de pistachos y carabineros marinados. Una combinación sofisticada y original, perfecta para sorprender en una comida especial o simplemente para darte un capricho con sabor a mar y aroma italiano. En esta receta, la intensidad del pecorino, la suavidad del pesto de pistachos y el toque marino de los carabineros se funden en un plato que lo tiene todo: textura, color y carácter.
Para realzar aún más esta experiencia, Gianni ha elegido un formato de pasta con personalidad: las Casarecce Garofalo. Su forma rizada y envolvente es perfecta para atrapar la crema de pecorino y el pesto, creando bocados llenos de sabor. Una receta pensada para quienes disfrutan cocinando con ingredientes de calidad, cuidando cada detalle y, sobre todo, disfrutando de cada plato como una celebración.
40'
2
Alta
Ingredientes
200 g de casarecce Garofalo
80 g de queso pecorino romano rallado
50 g de pistachos pelados
150 g de carabineros frescos
1 cucharada de jugo de limón
Aceite de oliva virgen extra
Sal y pimienta
Productos Garofalo
Preparación
Marinamos los carabineros en frío
Comenzamos esta receta gourmet preparando uno de sus elementos estrella: los carabineros marinados en frío. Límpialos con cuidado, retirando la cabeza, cáscara y el intestino. Después, córtalos en trozos medianos y colócalos en un bol con aceite de oliva virgen extra, sal, pimienta y una cucharada de jugo de limón.
Mezcla bien y deja reposar la mezcla en la nevera al menos 15 minutos. Este paso aporta una nota fresca y marina que contrastará maravillosamente con la base cremosa de la pasta caliente. Una técnica simple que eleva el plato a otro nivel.
Preparamos el pesto de pistachos
Mientras los carabineros se marinan, vamos con el pesto. En un vaso de batidora, añade los pistachos pelados, una buena cantidad de aceite de oliva virgen extra, una pizca de sal y un poco de agua para ajustar la textura. Tritura hasta conseguir una crema suave, brillante y bien emulsionada.
Este pesto de pistachos tiene un carácter único y delicado. Al no llevar queso ni ajo, su sabor es limpio, perfecto para combinar con el pecorino y no competir con el sabor profundo de los carabineros. Guárdalo a temperatura ambiente para que esté listo cuando llegue el momento de la mantecatura.